miércoles, 30 de diciembre de 2009


Los zapatos hacen “clac clac” contra el suelo mojado y huele al humo del cigarro que se está fumando el hombre de delante. La voz de la mujer que rima con ella suena bajito pero marca el ritmo de sus pasos. De repente se para, se quita las gafas de sol y mira el reflejo del agua.
Un reflejo claro de una tarde de diciembre donde los pájaros nadan, los árboles serpentean y puedes pisar las nubes con solo acercar un poco el pie al agua.

martes, 29 de diciembre de 2009

Te lo digo "slowly"

Pues eso, que voy a ser breve y concisa.
Que para el que no quiere nada tengo yo mucho.


En consecuencia, hablaban de literatura, y empleaban personajes a manera de códigos. En Cambridge, se habían cruzado en la calle sin detenerse. ¡Todos aquellos libros, todas aquellas parejas felices o trágicas de las que nunca habían hablado!
Mencionar un "rincón tranquilo en una biblioteca” era una expresión cifrada. Consignaban asimismo la pauta diaria, con aburrido y amoroso pormenor. Él describía cada aspecto de la rutina carcelaria, pero nunca le hablaba de lo estúpida que era. Ya era bastante evidente. Nunca le dijo que temía hundirse. También estaba clarísimo. Ella nunca le escribió que le amaba, aunque lo habría hecho si hubiera creído que pasaría la censura. Pero él lo sabía.

Expiación, Ian McEwan

lunes, 28 de diciembre de 2009

25 de julio de 1999

Querido diario ya me estoi aciendo mayor y no te escrito mucho pero necesito escribirte. Ya sabes que me gusta un chico de mi clase Pablo ******, aunque sea un poco bajito a mi me gusta. Mantenemos nuestra relacion en secreto,el me dijo que yo le gustaba y el me gusta ami. Tengo nostalgia de el pero intento no echarle de menos. Este invierno pienso dar una fiesta de monstruos y le voy a invitar ¡ah! y le voy tambien inbitarle. Ayer se me cayo un diente y el ratoncito perez me trajo 2000 ptas, un traje de Barbie y un libro de Barbie, adios diario.

Estas son las cosas que me puedo llegar a encontrar mientras rebusco en los cajones. Si, yo a los ocho años molaba un puñao y tenia preocupaciones profundas. (El apellido lo pongo en asteriscos aunque resulte patético, pero nunca se sabe lalala) Y NO, las faltas no son aposta.

domingo, 27 de diciembre de 2009

Hice "chas" y aparecí a tu lado

Son las siete y veinte de la mañana, y es tal el frío que tengo hasta en el culo que he dejado por imposible la tarea de dormirme. Llevo una hora cavilando y el maldito frío y la falta de sueño (o ganas de dormir) han propiciado que llegue a diferentes conclusiones:

1. Soy tan desastre para con las medias nuevas como para con todo lo demás que se me pone por delante.
2. Cada vez que me cuentas algo importante, a lo que debería responder con una sonrisa o con una frase a la altura de las circunstancias, en vez de eso, siempre tengo una bonita frase propia de toda una gilipollas :)
Y 3. Que a los “diecialgo” años parecemos viejos, que dejamos de hacer las cosas más porque no debemos que porque no queramos.

Es una basura crecer y correr el riesgo de romperse algo.
O igual es que simplemente yo soy muy torpe y propensa a hacer agujeros.

jueves, 24 de diciembre de 2009


Tan tan


Hoy en día todo el mundo dice que la Navidad es falsa, que no existe el espíritu navideño y que todo es plástico y sonrisas de mentira. Será que soy una rancia o directamente una falsa como el resto de las personas, pero a mi me gusta todo esto. Me gusta poner un árbol lleno de bolas de cristal, los renos rojos, azules y amarillos que alumbran las calles, comer turrón y mazapán como una guarra, los villancicos horteras, ver Noche de Fiesta y bailar con mi abuela e incluso el anuncio de Trésor de Lancôme.
Sí, resulta asqueroso que toda esa gente que no se acuerda de ti en todo el año te felicite las fiestas y te compre un paquete de revoltijo porque es diciembre.
Dicen que es una careta, pero en mi caso puede que no. Debe ser que a mi todavía me emociona pensar que el Baltasar de la cabalgata de reyes de Madrid no es un negro pintado.

martes, 22 de diciembre de 2009

Tontadas varias

Esta es la historia de una vieja que recorre callejas huyendo de la vulgaridad.
Cada día al despertarse, mira por la ventana, se fuma un cigarrillo
y escucha de nuevo un viejo vinilo.
Abre el armario y rebusca entre los trapos,
Rosa chillón y amarillo luces de neón.
Zapatos de plástico con tacones fantásticos,
Medias de rejilla y un bolso de charol.

Siempre quiere lo que no tiene,
Siempre quiere a los que no la quieren.
Cuando tiene lo que quería, se le apetece algo nuevo.
¡Que divertido es este juego!
Jugar a no hacer daño a los que se reúnen a tomar el té,
Dejar a los extraños completamente del revés.

Rimar este poema es divertido, aunque carezca de sentido.
La vieja se va a la cama, con una camisa de flores,
Lee y relee los poemas que le dedican sus admiradores.
Ahora es tarde para todo esto, aunque en el futuro no descarte un comienzo.


*esta entrada no me convence del todo, pero ya que está escrita la subo. Si no sabes quien es Marina no trates de entenderla.

Plastilina.


Me encanta presumir de que tengo amigas con nombres guaises como Irene Patricia o Maria Luisa, que son modernas de una forma políticamente correcta (como dice la primera) y que se acuerdan de mi con cosas tan tiernas como estas (ironía ON).
Yo sé, que en el fondo a vosotras os gusta ver como tiro el helado de fresa por encima del vestido estilo Sr. Chinarro.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Copos de nieve

que se te posan en la nariz como mariposas en invierno.

jueves, 10 de diciembre de 2009

Triple mortal en la pista


El día que te sientas delante de una hoja rayada con un boli bic en la mano y empiezas a reflexionar sobre tus prioridades, te das cuenta de muchas cosas.

Uno, te percatas de que un día alguien aparece así, por casualidad, y te conviertes en todo eso que dijiste que nunca serías. Empiezas a dibujar corazones en los márgenes de los libros, escribes su inicial con los fideos de la sopa y en el vaho de los cristales. Dices cosas de las que antes te reías y sientes esa necesidad que te hace dependiente y te fastidia y a la vez te revuelve las tripas y te gusta. No sabes si durará siempre, pero de momento “siempre” es el presente y con eso vale. Se convierte en una prioridad.

Dos, hay un grupo reducido de personas que puedes contar con los dedos de una mano que están siempre ahí. (Todo esto suena cursi, repetitivo y a libro de religión católica de primaria pero dejarme seguir). Lloras con ellas, ríes, te emborrachas, cantas, te besas, te pierdes en el metro y compartes cama. No importa lo lejos que vivan o los pocos días que las veas al año porque, al fin y al cabo, eso acaba importando una mierda. Las quieres y punto. Son la prioridad número uno porque son pasado, presente y futuro.

Al llegar al tres, te das cuenta de que has madurado a pesar de que todo lo que hagas no tenga sentido y tu grado de responsabilidad roce el negativo. Esto es porque te piensas dos (o tres o cuatro) veces las cosas antes de hacerlas y sobre todo las que afectan a las dos prioridades anteriores.
Prefiero mil veces antes hacer un rasguño en el corazón de alguien que no es nada mío que romper el tuyo que está enredado en el mío, como si fuéramos siamesas, desde hace años.

Al llegar aquí, cierras la libreta, tapas el boli, miras por la ventana y suspiras con nostalgia.

martes, 8 de diciembre de 2009

Madrid.

Yo pienso que en caliente se escribe mejor y aunque acabe escribiendo cosas sin sentido por la falta de sueño, este es el momento.
Pocas veces cinco días, sí, solo cinco, me habían servido para darme cuenta de esas cosas.

De que 3 medioadultas (a veces cuatro) pueden sobrevivir en un piso sin que las ratas suban por las paredes. De que se puede sobrevivir a base de macarrones y hamburguesas (gracias don Burguer King),Billy no conoce las vacaciones,el bola8(ymedio) mola demasiado,el poLo de Limón sabe muy mien,todo es fetén con ellas y los demás,próxima parada Gregorio Marañón correspondencia con tu corazón, ShaCerdota, anda Marina,iros a hablar con la lengua,tenemos que bautizar al gato con un nombre bonito,mil cancíones que nos producen un estado de locura transitoria, gays putas y nazis,el negro que no duerme,odio Madrid pero quiero volver ahí,con dormir 4 horas puedes salir 16 de fiesta y maltratar tu hígado. Y ,porque yo nunca había ido por la calle parándome en cada paso de cebra,dándome besos mientras la gente pasa y las escaleras nos llevan bajo tierra.

Se entiende que pida otro,¿verdad?

miércoles, 2 de diciembre de 2009

eso.


Se resume todo en palabras mal dichas en francés. Sueños que son y no son y en yo y mis redundancias. En que no se me da nada bien y aún así te gusto. En jugar por la mañana como niños a hacer que fumamos con el frío y jugar a ser mayores fumándonos las noches. Decirte que te quiero en medio de un concierto y grabarte mi sonrisa en una polaroid. Pintarme los labios de rojo Chanel y beber vino barato mientras hablas de lugares exóticos a los que vamos a ir cuando seamos artistas famosos. Guardo la juventud en una flor en el pelo que nunca va a marchitarse y las carreras en mis medias son carreras contra el tiempo.

Vamos a gastarlo todo, el dinero, la salud, los me gustas y hasta las suelas de los zapatos.

jueves, 17 de septiembre de 2009

¡Buenos días!


-Buenos días, ¿en qué podría ayudarle?
- Si mire, yo quería un billete solo de ida a la ciudad esa donde los sueños se hacen realidad.
- ¿Quiere usted un billete de avión hasta Estados Unidos, la que llaman la tierra de las oportunidades?
- No, no. Yo le pido un billete a una ciudad donde se cumplen los sueños sí o sí sin posibilidad de fallar.
- Disculpe, pero no tenemos ningún billete a ese sitio…
- Pues en su anuncio dice que venden billetes a todo el mundo, no lo entiendo, a mi me parece un destino muy solicitado.
- Pues lo lamento pero no tenemos. ¿Puedo ayudarle en algo más?
- Si bueno… Es que resulta, que yo soy un fracasado ¿sabe? Yo, como miles de personas, la he cagado en la vida. Yo de joven tenía miles de sueños. Ser un artista, tener una vida “boho-chic”, ir a fiestas, enamorarme cientos de veces, quizá formar un grupo de música y tener fama de esa que pone consumir preferentemente antes de… Pero aquí me ve, trabajando de abogado, que no es malo en absoluto, pero es como si te regalan una botella de don Perignon y detestas el champagne. Estoy casado y tengo dos hijos, pero claro, es lo que tienen los niños, nacen, tu vida se termina y comienzas a vivir la suya, es ley de vida amigo. Por eso pedía un billete, una segunda una oportunidad no me venía mal. Suena egoísta, pero ya me estoy cansando de levantarme cada mañana, tomarme el mismo puto desayuno, ir al trabajo, volver a casa y leer el periódico para ver como nos cargamos poco a poco el mundo.
Pero bueno, si no tiene ningún billete disponible probaré con otra agencia.

lunes, 3 de agosto de 2009

De Viaje.


Cada momento vivido nos marca y mide nuestra vida pero no dejamos de ser unos turistas que están de paso. Nacemos, crecemos, aprendemos, amamos, lloramos y morimos. Cada instante de la vida de cada persona es único pero no deja de haberse repetido con anterioridad. Mi madre, me leía hoy su diario y veía como una mujer de cuarenta y tantos que yo creía que no podía entender lo que vivo, se había enamorado como una imbécil, había llorado y se había emborrachado como yo hago.
Por eso somos turistas de nuestra propia vida, porque aunque pensemos que todo es nuevo, es ya un destino y una parada gastada y obligada por miles de personas que a lo largo del viaje de la vida, han pasado ahí unas vacaciones.

domingo, 5 de julio de 2009

vintage, coffee and love

Aquellos años juntos habían sido como el humo de un cigarrillo, fuerte al principio y después ligeros y efímeros. Como un vinilo rayado, simplemente ya no funcionaba igual que cuando lo habían comprado. Habían sido como una canción de amor, dulce y que te hace llorar o como unos vaqueros gastados hechos para dos. Su amor había sido un amor “retro”, era algo pasado pero que en ciertos momentos tenía su encanto y que el simple hecho de recordarlo les hacía volver hacia atrás.
Esos momentos juntos cabían en dos álbumes de fotos, varias polaroid pegadas con celo a la pared, infinitas mañanas enredados en las sábanas y tardes con sabor a café y barra de labios. Las primaveras habían sido más verdes, los veranos en la playa más largos, los otoños se contaban por las tarde que habían pasado en casa y los inviernos parecían menos fríos.
La despedida no ocupaba los cajones de una mesita, tampoco se había esfumado con las últimas palabras. El último adiós quedaría para siempre marcado en una servilleta del bar de la esquina con tres palabras escritas con lápiz de ojos, "te recordaré siempre".

photo,Irene

sábado, 4 de julio de 2009

Cuestión de confianza


La confianza es un salvavidas que nos ayuda a que no nos ahoguemos en la maldad de las personas. Ayuda a evitar que las mentiras no nos dejen respirar y a que no nos lleve la corriente del odio. Pero todo termina cuando una ola se lleva el salvavidas.

Confiar en alguien es un sencillo proceso. La confianza se divide en varios niveles, en el primer nivel está la confianza con la familia, algo incondicional que nadie traicionará. El segundo nivel se basa en la confianza en los amigos, es un nivel con varios escalones que se van subiendo a medida que pasa el tiempo. Están llenos de resbalones y muchas veces, esta escalera es tan larga que resulta mucho más fácil deshacer el camino que subir los pocos escalones que quedan por recorrer. Se termina con los desconocidos. ¿Por qué es tan sencillo confiar en un desconocido? Quizá porque no nos va a juzgar por lo que creen que somos, podemos ser transparentes como una gota de agua y no tenemos miedo a nada.
Pero es sencillo romper la confianza. Romper esta palabra es más que hacer pequeños trocitos y juntar las letras dando otro sentido. Significa romper el proceso, deshacer lo hecho, infectar con un virus que puede curarse una, o quizá dos veces pero alguna más deja secuelas. La confianza no debe ser una inválida o una mariposa a la que se le han arrancado las alas.

lunes, 29 de junio de 2009

"Modernismo"


No me gusta la gente que se da aires de grandeza, que se cree el primero en todo y sobre todo con más derecho que nadie a criticar. Me revienta de verdad la gente que critica la falsedad y la artificialidad cuando no se dan cuenta que ellos son también verdaderos productos del mercado. No podemos pensar que somos realmente originales cuando todo está prácticamente inventado, en todo caso podemos aspirar a que nos denominen raros o diferentes a la “grandísima” mayoría. En la sociedad de hoy en día donde todo está dominado por la imagen, es difícil, por no decir imposible, escapar de ella. A todos nos gusta ser guapos, ser aceptados por el grupo o tribu urbana con la que nos sentimos identificados y creernos el móvil de última generación, la música más moderna en tu I-pod de colores y el pelo más raro y con más colores. Y me pregunto yo, ¿y que coño más te da? ¿Acaso no compras en cadenas de tiendas mundiales? ¿No compras revistas que promocionan toda esa mierda? ¿No te lees los libros más raros y aburridos para sentirte especial? Sí, para sentirte diferente y “original” y para decir que tu rollo es más cool. En mi opinión, en el mundo en que vivimos hoy, solo sería rara de verdad la persona que se va a vivir a un monte para escapar de todo o que colecciona cromos y revistas de hace 50 años para sentirse como entonces.
No critique esa falsedad cuando eres el primero en ser un falso colgando etiquetas a las personas que hacen lo que les haces felices. Tampoco diciendo que rechazas lo que te ofrece la sociedad actual porque es todo igual. Yo lo admito, me gusta el plástico, no reciclo, veo la basura que ve todo el mundo, leo los putos best-sellers que más tiran y escucho la música que sale en youtube y créeme, me siento a gusto conmigo misma y original, tan original como las miles de personas que son exactamente igual que yo.

Recuerdos.

Llueve a todas horas mojando los cristales y las hojas de los árboles, limpiándolo todo y a la vez ensuciándolo, retardando la llegada del verano. Aún así, cuando miro las hojas mojadas y aspiro el aire húmedo me parece que todo es rosa y azul. No sé por qué, pero prueba a cerrar los ojos y a sentir la lluvia de mayo en la cara y verás como el mundo, o al menos una pequeña parte de él, se llena de colores que huelen a hierba y recuerdos.
La vida debería ser así siempre, no solo en los días de mayo. Que cerrando los ojos todo fuera rosa, es más, que nuestros mejores recuerdos se presentasen otra vez disfrazados de colores para alegrarnos. Pero lo único que veo cuando al final abro los ojos, es el cristal de la ventana dibujado de gotitas de lluvia y una canción, que es lo único que queda de aquel recuerdo.